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Mayo 14, 2022

La Universidad de Minnesota en EE. UU., otorga un doctorado honoris causa

La Universidad de Minnesota de EE. UU., otorga un doctorado honoris causa
La entrega del doctorado honoris causa se realizó durante la ceremonia de graduación del programa de Máster en Políticas Públicas del Instituto Humphrey de Asuntos Públicos, en la Sala de Conciertos Ted Mann del campus

El 14 de mayo de 2022, la Universidad de Minnesota (UM) en los EE. UU. otorgó a Daisaku Ikeda, fundador de la Universidad Soka, un doctorado honoris causa en humanidades por su contribución al fomento global de la educación y la paz. El otorgamiento se realizó durante el acto de graduación del programa de Máster en Políticas Públicas del Instituto Hubert H. Humphrey de Políticas Públicas (HHH). El presidente de la junta de regentes de la universidad, Kendall J. Powell, y la decana del Instituto de Asuntos Públicos, Nisha Botchwey confiaron el diploma acreditativo al vicepresidente de la SGI, Yoshiki Tanigawa, que viajó desde Japón.

La Universidad de Minnesota, cuyos orígenes se remontan a 1851, es una de las principales universidades públicas de los EE. UU. en materia de investigación. Entre sus graduados cuenta con 25 laureados con el Nobel. La ciudad de Mineápolis, donde se emplaza la institución de enseñanza superior, confirió al presidente Ikeda una ciudadanía honoraria en marzo de 2020, y en octubre del mismo año, inauguró la Arboleda de Cerezos por la Paz, en el parque Loring en homenaje a los tres presidentes fundadores de la Soka Gakkai y a su filosofía de creación de valor.

Doctorado honoris causa en humanidades otorgado a Daisaku Ikeda
Diploma de Doctor honoris causa en humanidades

El fundador Ikeda fue recomendado para el título por el Instituto Humphrey de Asuntos Públicos y por la Facultad de Ciencias de la Alimentación, la Agricultura y los Recursos Naturales (CFANS). La decana asociada del Instituto Humphrey, Catherine Squires, supo inicialmente de los esfuerzos del señor Ikeda por la paz y quedó impresionada por su filosofía y acciones, que coinciden con la misión de la escuela de posgrado de «servir al interés público en un mundo diverso».

La decana Botchwey presentó al señor Ikeda como «una persona de extraordinario calibre e inmensos logros» poniendo de relieve sus continuas contribuciones por la paz y la noviolencia a sus 94 años. Destacó su propuesta de paz del 2022, «Transformar la historia humana: Un haz de luz hacia la paz y la dignidad», que, según dijo, aboga con firmeza por la importancia de las conexiones entre los seres humanos como medio para superar las crisis globales.

Tras la lectura de la mención por parte del presidente de la junta, Powell, el vicepresidente de la SGI Tanigawa, leyó un mensaje del señor Ikeda en el que expresaba su agradecimiento por el honor recibido. Comenzó extendiendo sus felicitaciones a los graduados, diciendo que, como fundador de una universidad, conocía las profundas emociones con las que se despide a los graduados año tras año.

Tras señalar que el río Misisipi tiene su nacimiento en Minnesota, expresó su deseo de que, al igual que las aguas del río permanecían conectadas «en una corriente continua que enriquecen vastas extensiones de tierra… cada graduado, imbuido con la vida de la universidad y recurriendo a ella como un inagotable manantial para el espíritu, siga creando valor para la humanidad».

Foto conmemorativa tras la entrega del certificado acreditativo del doctorado honorífico a Daisaku Ikeda
El vicepresidente de la SGI Tanigawa (primera fila, cuarto por la derecha), la decana Botchwey (tercera por la derecha) y el presidente de la junta de regentes Powell (segunda fila, segundo por la izquierda) en una foto conmemorativa junto a otros miembros de la facultad

El señor Ikeda dijo a continuación que hacía exactamente 50 años desde que había entablado una serie de diálogos con el historiador británico doctor Arnold J. Toynbee. Recordó que Toynbee había pronunciado una conferencia en la Universidad de Minnesota en 1955 en la que abogaba que la única manera de evitar la destrucción de la humanidad era que los pueblos del mundo aprendieran a abrazar y respetar su diversidad. Con este espíritu –agregó– el señor Ikeda, ha continuado la búsqueda del diálogo.

Uno de ellos fue con el doctor M.S. Swaminathan, renombrado agrónomo indio, con quien el señor Ikeda había conversado sobre los logros del doctor Norman Ernest Borlaug, antiguo alumno de la Universidad de Minnesota, galardonado con el Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos para reducir el hambre en el mundo. Las palabras del doctor Borlaug «no puedes construir un mundo pacífico sobre estomágos vacios y miseria humana» y su llamamiento afirmando que «es la cooperación y no la competencia la que debe estar en el orden del día», deben ser escuchadas ahora más que nunca, declaró el señor Ikeda.

Al final, expresó su deseo de que los graduados de la universidad logren «realizar grandes contribuciones para el futuro de una humanidad unida» y concluyó su mensaje con el compromiso de «trabajar, junto a los jóvenes de todo el mundo, para asegurar que la gran corriente por la paz, la cultura y la educación continue hacia el futuro».

[Adaptado del artículo publicado el 17 de mayo de 2022, del Seikyo Shimbun, Soka Gakkai, Japón]

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